A lo largo de los siglos, la Iglesia y los santos han animado a los fieles a amar la Eucaristía e incluso hay quienes han dado su vida por protegerla.
Como sabemos, Jesús reunido con sus apóstoles en la Última Cena, instituyó el sacramento de la Eucaristía: “Tomen y coman; esto es mi cuerpo…” (Mt, 26, 26-28). De esta manera hizo partícipes de su sacerdocio a los apóstoles y les mandó que hicieran lo mismo en memoria suya.
El Concilio de Trento (siglo XVI) define claramente: «En el Santísimo Sacramento de la Eucaristía se contiene verdadera, real y sustancialmente el Cuerpo y Sangre de nuestro Señor Jesucristo, juntamente con su Alma y Divinidad. En realidad, Cristo íntegramente». Asimismo, en el Derecho Canónico, ninguna otra festividad recibe tanta atención como la Solemnidad del Corpus Christi.
En tiempos de verdadera prueba, invitamos a toda la Comunidad del Colegio a unirnos en oración por todas nuestras familias, en esta oportunidad que nos brinda la celebración.
Bendecir la incipiente vida nueva.
Con frente a nuestro proyecto esperanzador y repetido a través de estos últimos años, el viernes 22 de marzo se ha realizado un gesto que une a la dulce espera – experiencia santa de la Virgen María – a las embarazadas de nuestro Comunidad, en la proximidad de la fiesta de la Anunciación